Aries
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aries

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Caracteristicas Generales

ARIES es sobre todo la vitalidad en expansión. Siendo el primer signo del elemento Fuego, posee sus características de forma exaltada. En Astrología está representado por el carnero. ARIES es el guía, el pionero, el ser que abre camino. Ha nacido para ello. Está dotado para ser jefe, arrastrar a las masas, guiar a los demás. Posee un brillo social por naturaleza, pero en vez de hacerse escalo de él, lo considera una circunstancia propicia... y nada más.

La fuerza vital que siente dentro de si le obliga a una acción constante, tanto en lo físico como en lo espiritual o mental, con la particularidad de que, siendo un creador nato, es a la vez un gran realizador. Ambas facultades unidas producirán un excelente resultado. En sus proyectos, ARIES es a su vez capaz de la mayor meticulosidad. Una inteligencia amplia, analítica, fría en los momentos necesarios, le convierte en una persona capaz de medir el pro y el contra de un problema. ARIES será capaz de convertirse en un ser humano cerrado en el mayor de los egoísmos de tipo personal, pero también, como jefe y guía, en el más desprendido y generoso, sin importarle perder sus derechos o propiedades. Y es que en el fondo, estos nativos son unos sensibles.

Luchador incansable, arrastrará a los demás en pos de sus continuos proyectos, atinados a veces, absurdos otras, pero siempre sinceros, llenos de grandeza y posibilidades. Siendo símbolo de la máxima acción, será capaz de encerrarse en una habitación, en un sitio y permanecer en él durante semanas, sin ver a nadie, sin necesidad de los demás, meditando, forjándose, creando y realizando.

Es sensual, sexual en alto grado... y puro. ¿Puede entenderse esto? Sí. El secreto de estos nativos reside no sólo en su tremenda vitalidad expansiva, sino también en que a la vez son profundos. Creemos que entre ellos puede darse el hombre, o la mujer, capaz de las mayores destrucciones, pero también el que entrega su vida a un alto ideal político, humano, social o religioso. El misticismo puede ser su fuente de acción y de plenitud. También puede serlo un negocio. O una mujer. O la buena mesa simplemente.

Colérico, duro, tenaz, porque su fuerza vital debe surgir, desarrollarse o realizarse. De no ser así, el nativo de ARIES llegaría a la anulación físico-mental de su personalidad. En muchos casos es, también, un loco por exceso, de precipitación de proyectos, de ambición, o todo lo contrario, de generosidad.

EN SENTIDO NEGATIVO

Estos nativos son incapaces de dominarse en la expansión de su fuerza vital. La formación de los mejores proyectos, a los que se entregan totalmente, no va siempre acompañada de una realización adecuada. No es que a la hora de realizarse les falten energías suficientes, es que apenas iniciada una etapa se hallarán metidos de lleno en la planificación de otra, sin dar tiempo a que las cosas forjadas anteriormente cuajen, lleguen a fructificar plenamente. Impaciencia, nerviosismo. Trazado un plan, quieren verlo ya realizado, siendo incapaces de esperar, lo que constituye un fracaso, una dificultad.

Le sobra imaginación para crear, profunidad para concebir y captar el ambiente que le rodea, intuición para elegir el camino acertado, fuerza para realizar. Pero le falta paciencia. Es un huracán desatado.

Negativamente es una persona violenta, colérica, agresiva, pendenciera, fanática hasta imponer su criterio sobre toda conveniencia, irreflexiva y destructora. Son impulso y fuego y lo serán para construir y destruir. Destruye todo, cuando se pone a destruir. Carece de matices, d emedias tintas. Lo que no le faltará nunca es impulso, combatividad. Cuando destruye empieza por destruir lo que le rodea y sigue destruyéndose a sí mismo. Se convierten entonces y con facilidad en personas «quemadas».

Mientras esto no ocurra, mientras ARIES no se convierta en una persona quemada por exceso de fuerza, hará y rehará su vida. No importa que hoy esté en la cumbre y que mañana se halle abajo, hundido física, económica o socialmente. Luchará como nadie más que él sabe luchar, proyectará nuevos caminos, se enfrentará al mundo y volverá a alzarse. Lo que no impedirá que vuelva a caer estrepitosamente otra vez.

Es como si estos nativos llevaran dentro un motor demasiado revolucionado, que les obligara continuamente, durante su existencia, a vivir de forma acelerada.